Dos ingenieros dominicanos asi como el arzobispo de Puerto Príncipe, Serge Mior y cuatro cascos azules de la ONU, entre ellos posiblemente el Jefe de la Minustah, figuran entre las víctimas del terremoto que devastó este martes la capital haitiana, según confirmaron fuentes oficiales. Los dominicanos muertos son José Rafael Medina y Guillermo Peña, quienes residían en Santo Domingo y Jarabacoa, respectivamente, y laboraban para la empresa Mera Muñoz y Fondeur. Su deceso se produjo al colapsar el edificio de esa compañía. Alrededor de 14 personas que se encontraban allí están heridas y otras desaparecidas.
Los dos profesionales fueron localizados por uno de los sobrevivientes de la tragedia, quien luego pudo llamar a su empresa en República Dominicana y contar del aplastamiento de ellos por el concreto.
El edificio de la empresa de Santiago Mera Muñoz y Fondeur se estaba ubicado a la entrada de la capital haitiana. Su ocupación era compartida con otra empresa que construye la carretera Puerto Príncipe-Mirebalai
La edificación en la que murieron además varios haitianos resultaron heridos Renato Polanco, Pasal Banbacu, Rafael Peña y su hijo quienes pudieron salir de entre los escombros.
Una fuente de la empresa Mera Muñoz y Fondeur contó que afortunadamente fuera del edifico se encontraban al momento del terremoto los ingenieros Danny Francisco, Doan Cruz, Antonio Matos y Oscar Veras Hijo. Mientras, está desaparecido el administrador Luís Bolívar Núñez y alrededor de 10 personas entre haitianos y dominicanos.
La otra empresa de Santiago dedicada a la construcción en Haití, Ingeniería Estrella, informó por intermedio de su presidente el ingeniero Manuel Estrella, que no habían sido afectados porque se encuentran a 50 kilómetros de la capital haitiana en un campamento móvil.
Estrella dijo que desde el martes en la noche sus equipos laboran en la remoción de escombros de las edificaciones afectadas, mientras tratan de encontrar sobrevivientes.
Muerte del arzobispo
El prelado Serge Miot fué hallado muerto tras el derrumbe de la sede del arzobispado.
Jefe de la Minustah
Al menos cuatro cascos azules brasileños de la misión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Haití (MINUSTAH) han muerto a causa del terremoto que ha devastado esta noche Haití. Otros muchos están desaparecidos y se teme por sus vidas porque el edificio de la Naciones Unidas en Puerto Príncipe, con unas 200 personas en su interior, se ha venido abajo, como muchas otras infraestructuras.
Incluso el ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner, da por seguro que entre los fallecidos está el jefe de la misión de la ONU en el país, el tunecino Hedi Annabi.
"El edificio de la ONU se ha derrumbado y parece que todos los que estaban dentro, entre ellos mi amigo Annaba, el enviado especial del secretario general de Naciones Unidas, y todos los que estaban a su alrededor, están muertos", ha declarado Kouchner a la radio RTL. El diplomático tunecino se estrenó como jefe de MINUSTAH en septiembre de 2007. Anteriormente, fue secretario general adjunto de la ONU para las operaciones de mantenimiento de la paz.
Sí está confirmado que al menos cuatro soldados brasileños de la Minustah han fallecido a causa del terremoto, pero el general Carlos Barcellos teme que sean muchos más, ya que hay muchos desaparecidos.
En una rueda de prensa en Brasilia, ha dicho que "la cifra de muertos y heridos puede ser muy alta". China también ha informado de que 10 de sus cascos azules están desaparecidos. Pekín mantiene una misión con 125 personas en el país.
Brasil es el país que encabeza la fuerza de paz de la ONU desplegada en Haití desde junio de 2004. Entonces, una rebelión forzó la salida del presidente, Jean-Bertrand Aristide, y la situación se descontroló de tal manera que Naciones Unidas lo consideró una amenaza para la estabilidad de la región, por lo que decidió el envío de una fuerza de paz (Minustah, Misión de la ONU para la Estabilidad en Haití) que hoy día está compuesta, según su página web oficial, por "7.031 soldados y 2.034 policías, apoyados por 488 funcionarios internacionales, 1.212 funcionarios nacionales y 214 voluntarios de la ONU".
Aunque su misión era la de mantener la paz, la MINUSTAH se ha visto obligada a ejercer labores de ayuda humanitaria, ya que Haití ha sido golpeado con dureza por otras catástrofes, en especial los huracanes de 2004 y en 2008, en los que perecieron miles de personas.
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